El triunfo de Trump y la "evolución cultural"
En estos días, las redes sociales estarán sedientas de respuestas que expliquen el reciente triunfo de Donald Trump en las elecciones en Estados Unidos. Dos libros pueden aportar al debate.
En estos días, las redes sociales estarán sedientas de respuestas que expliquen el reciente triunfo de Donald Trump en las elecciones en Estados Unidos. Dos libros que pueden aportar al debate de este hecho coyuntural son: Cultural Evolution: People’s Motivations Are Changing, and Reshaping the World (2018) y Cultural Backlash: Trump, Brexit, and Authoritarian Populism (2019).
La evolución cultural
Ronald Inglehart sostiene que los valores y comportamientos de las personas están profundamente influenciados por el nivel de seguridad existencial que experimentan. En, Cultural Evolution: People’s Motivations Are Changing, and Reshaping the World, presenta una versión de la teoría de la modernización —la teoría de la Modernización Evolutiva—. Sostiene, justamente, que la inseguridad económica y física conducen a la xenofobia, a una fuerte solidaridad dentro del grupo, al apoyo a políticas autoritarias y a la rígida adhesión a las normas culturales tradicionales del grupo.
Un gran cuerpo de evidencia, analizado utilizando tres enfoques diferentes - (1) análisis de cohortes; (2) comparaciones de países ricos y pobres; (3) examen de las tendencias reales observadas en los últimos 40 años - todos apuntan a la conclusión de que se están produciendo cambios culturales importantes y que reflejan un proceso de cambio intergeneracional vinculado con niveles crecientes de seguridad existencial. (Inglehart, 2018)
Es decir, el grado de seguridad existencial que experimenta una sociedad influye significativamente en sus normas culturales. Cuando la supervivencia es precaria, como ha sido durante la mayor parte de la historia, las sociedades tienden a enfatizar la solidaridad de grupo, el rechazo a los extranjeros y la obediencia a los líderes fuertes.
Por el contrario, las condiciones de seguridad fomentan una mayor tolerancia hacia los grupos externos, la apertura a nuevas ideas y normas sociales más igualitarias, lo cual fomenta la apertura al cambio, la diversidad y las nuevas ideas.
La modernización evolutiva
La modernización, caracterizada por el crecimiento económico, la expansión de la educación, la igualdad de género y la diversidad étnica, impulsa cambios culturales. A medida que las sociedades se modernizan, sus valores cambian de un enfoque en la supervivencia a un énfasis en la autoexpresión, la tolerancia y la autonomía individual.
Acontecimientos específicos como las crisis económicas o las oleadas de inmigración pueden influir en los valores de una sociedad. Sin embargo, a largo plazo, estos efectos de período a menudo se anulan entre sí, mientras que los efectos del reemplazo poblacional tienden a ser acumulativos. De forma más específica, Inglehart argumenta que el reemplazo generacional es el mecanismo más poderoso de cambio cultural a largo plazo.
Los valores cambian gradualmente a través del reemplazo generacional. Las generaciones más jóvenes, que crecen en condiciones diferentes a las de sus predecesores, tienden a tener valores diferentes.
Consecuencias de la Evolución Cultural
Para Inglehart, a medida que aumenta la seguridad existencial, las sociedades experimentan un cambio de valores materialistas, centrados en la seguridad económica y física, a valores postmaterialistas, que priorizan la libertad de elección, la autoexpresión y la calidad de vida.
Las normas relativas a la igualdad de género y la tolerancia de la homosexualidad están cambiando rápidamente en las sociedades con altos niveles de seguridad existencial. Este cambio cultural se refleja en la legislación sobre la igualdad de género y el matrimonio entre personas del mismo sexo.
La evolución cultural y el cambio de valores, podría fomentar la difusión de la democracia. Las sociedades con valores de autoexpresión tienden a apoyar más a las instituciones democráticas. Aunque eso suena optimista, Inglehart también aborda el fenómeno del “retroceso cultural”.
Argumenta esto como una reacción a los cambios culturales progresistas asociados con la modernización evolutiva, como la creciente tolerancia hacia la diversidad, la igualdad de género y los derechos LGBTQ, lo que da pie al auge del populismo autoritario en muchos países.
En otros términos, estos movimientos, y otros, representan una reacción contra los cambios culturales asociados a la modernización y buscan restaurar un orden social tradicional percibido como amenazado.
Cultural Backlash o contragolpe cultural
En otro libro, que tiene como coautor a Inglehart, Cultural Backlash: Trump, Brexit, and Authoritarian Populism, junto con Pippa Norris se refieren al auge de la “derecha populista”. Según los autores, esto se debe a una compleja interacción de factores culturales, económicos y sociales.
La Revolución Silenciosa en Valores Culturales
Desde la segunda mitad del siglo XX, las sociedades occidentales han experimentado una transformación gradual hacia valores más liberales y postmaterialistas. Esto se debe en gran parte al reemplazo generacional, donde las cohortes más jóvenes, que han crecido en un entorno de mayor seguridad económica y física, dan prioridad a la libertad individual, la autoexpresión y la tolerancia a la diversidad cultural.
El libro señala que esta revolución silenciosa ha generado una reacción violenta entre los sectores más conservadores, quienes perciben esta transformación como una amenaza a sus valores tradicionales y a su estatus social.
El Malestar Económico y la Globalización
La globalización, la desindustrialización y la creciente desigualdad económica han generado inseguridad financiera y laboral para muchos sectores de la sociedad, particularmente para la clase trabajadora. Este malestar económico ha contribuido a la desconfianza hacia las élites políticas y económicas, y ha hecho que algunos sectores sean más receptivos a los mensajes populistas que culpan a la inmigración y a las políticas liberales por sus problemas.
El libro destaca que, si bien el malestar económico no es la única causa del auge de la derecha populista, juega un papel importante al exacerbar las ansiedades culturales y al crear un terreno fértil para los mensajes nacionalistas y xenófobos.
El Aumento de la Diversidad Étnica y la Inmigración
El aumento de la inmigración y la creciente diversidad étnica en las sociedades occidentales han intensificado los temores de algunos sectores sobre la pérdida de la identidad nacional y cultural. La percepción de amenaza cultural, especialmente entre los grupos que se sienten más afectados por estos cambios, ha contribuido al apoyo a partidos populistas de derecha que prometen proteger la cultura y los valores tradicionales, a menudo mediante políticas restrictivas de inmigración.
Es importante destacar que el libro no afirma que la inmigración sea intrínsecamente negativa, sino que la forma en que se ha gestionado y el discurso que la rodea han contribuido a generar un clima de miedo y resentimiento que beneficia a la derecha populista.